
En 2024, la remuneración de los asalariados fue el principal componente de la renta en la Unión Europea (UE), representando el 47,9% del PIB y el 48,5% en la eurozona. Esto supuso un aumento de 0,9 y 0,8 puntos porcentuales (pp) respectivamente en comparación con 2023.
Catorce países superaron la media de la UE en este indicador, con Letonia (55,4%), Alemania (54,5%) y Austria (52,9%) a la cabeza. En nueve países, este componente representó más de la mitad del PIB. En el extremo opuesto, Irlanda registró la proporción más baja (28,5%), debido a los efectos de la globalización en su economía.
Los impuestos sobre la producción e importaciones (menos subvenciones) aumentaron al 11,2% del PIB en la UE, con Suecia (19,5%) y Croacia (16,9%) en los niveles más altos. Por otro lado, el excedente bruto de explotación y la renta mixta, que reflejan las ganancias empresariales y los ingresos de autónomos, disminuyeron al 40,9% en la UE y al 40,7% en la eurozona, con descensos de -1,3 pp y -1,2 pp respectivamente.
A lo largo de los últimos 20 años, la proporción de la remuneración de los empleados en el PIB ha crecido en la UE (+1,3 pp) y en la eurozona (+1,6 pp). Letonia (+15,6 pp) y Lituania (+10,9 pp) registraron los mayores aumentos, mientras que Irlanda experimentó la mayor caída (-9,5 pp). En el mismo periodo, la proporción de sueldos y salarios también aumentó en la UE (+1,8 pp) y en la eurozona (+1,9 pp), mientras que las cotizaciones sociales de los empleadores disminuyeron ligeramente.
En cuanto a los impuestos sobre la producción e importaciones, su peso en el PIB ha fluctuado en las últimas dos décadas, con descensos durante la crisis de 2008-2009 y la pandemia de COVID-19, aunque en 2024 aún no recuperó los niveles prepandemia. Por su parte, la proporción del excedente bruto de explotación y la renta mixta, tras un aumento entre 2020 y 2023, descendió en 2024 a niveles similares a los de 2020, reflejando cambios en la estructura de ingresos de la economía europea.
Fuente: EUROSTAT